sábado, 25 de agosto de 2012

El nivel del mar no sube solo por el cambio climático


    El nivel del mar ha aumentado una media de 1,8 milímetros al año en todo el mundo desde 1961 a 2003. 
   El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en un informe de 2007 calculó que el aumento debido a la expansión térmica de los océanos y al deshielo de los casquetes polares y glaciares suponía 1,1 milímetros anuales. 
    Durante estos últimos años se ha cuestionado si los datos del IPCC eran correctos, y en ese caso de donde salían esos 0,7 milímetros adicionales. 
Un estudio publicado  por científicos de la Universidad de Tokio en Nature Geoscience ha encontrado la respuesta. Explican que es debido a la extracción de agua de acuíferos subterráneos, ríos y lagos por el hombre.

Este agua no se repone y llega al mar a través de los ríos o la evaporación del suelo.
El principal contribuyente es el agua subterránea extraída por el hombre. Otros son el embalse artificial de agua, el cambio en las condiciones de retención de agua de los ecosistemas terrestres debido a modificaciones en el clima y la perdida de agua en cuencas cerradas.
Estos factores son los responsables de la subida del nivel del mar en 0,77 milímetros al año desde 1961 a 2003, un 42% del total.
La subida del nivel del mar afecta a cientos de millones de personas que viven en las costas.
Un pequeño aumento anual puede transformar sus condiciones de vida: inundaciones por las mareas y la salinización de las tierras agrícolas próximas a la costa son dos de los problemas más frecuentes.

Ex vicepresidente yanqui Al Gore; visionario o mentiroso...

Le han dado a Al Gore el premio Nobel de la Paz por su contribución a la lucha contra el cambio climático. Se le ha concedido el galardón al mismo tiempo que un juez británico sentenciaba que Gore miente al menos nueve veces en su célebre documental de alarma ecológica. ¿Cuáles son esas mentiras de Al Gore? Aquí se las explico, con las razones que el juez Burton –así se llama el magistrado- aduce como prueba. Y a todo esto, ¿qué hace un juez pronunciándose sobre esas cosas? Ocurre que el documental de Gore está siendo difundido en todas las escuelas inglesas por orden de la administración. Un camionero, padre de un alumno, protestó por vía legal. La Justicia le ha dado la razón. Estas son las nueve mentiras de Al Gore. 
Las nueve mentiras de Al Gore,premio Novel de la Paz.


Todos los periódicos británicos se han hecho eco de la noticia. El escepticismo es uno de esos principios de los que sí se podrían incluir en el debate sobre qué significa ser británico. Y el descreimiento de los brits puede que le chafe el tenderete a Al Gore, que ahora se ha metido a predicador. Es curioso lo de este caballero, que de repente ha tenido una revelación y se ha visto impulsado a hacer algo para cambiar los hábitos de las sociedades y salvarlas de un futuro que se anuncia catastrófico, según él.

Desde el reducido ángulo de visión del ciudadano de a pie, sobre todo en las ciudades, parece evidente que los hábitos de consumo generan una cantidad de basura y gasto de energía tan notables que uno se pregunta a dónde irá la primera y cuánto durará la segunda. La visión a muy corto plazo de todos, desde las élites gobernantes y financieras, hasta la gente a pie; un individualismo que se vuelve a veces caníbal en las urbes modernas y, sobre todo, una vida carente de trascendencia, puede llevar a verlo todo muy negro, sin necesidad del documental de Gore.

Y en las situaciones de desolación (espiritual) es cuando aparecen los salvadores. Su palabra suena como la de los dioses, y sus obras parecen milagros. Y desarmados y desamparados, nos sumamos a sus creyentes. Pero hay muchos que saben todo esto y que lo usarán en su propio provecho, y Dios sabe para qué intereses (que si no serán oscuros, tampoco serán los de todos). ¿Será Al Gore uno de estos vendedores de humo? No lo sabemos. De momento, el Juez Burton ha encontrado nueve errores peligrosos en su mensaje al mundo:

1 ERROR: Gore afirmó que el nivel del mar podría subir hasta 7 metros debido al deshielo de las placas polares.

Juez: “Esto es extremadamente alarmista”, y solo ocurrirá después de un milenio o aún más tiempo.

2 ERROR: Los atolones del Pacífico, debido a su baja cota respecto al mar, han sido ya evacuados.

Juez: No hay evidencia de que ninguna evacuación se haya llevado a cabo en atolón alguno.

3 ERROR: La Corriente del Golfo de México, que calienta el Atlántico Norte, dejaría de fluir.

Juez: Sería “muy raro” que dicha corriente se cerrara en el futuro; otra cosa es que su fuerza disminuya, pero ¿dejar de fluir?

4 ERROR: Los gráficos que muestran la relación entre el incremento de CO2 y de la temperatura a lo largo de 650.000 años encajan perfectamente.

Juez: Existe cierta conexión, pero la eventual correspondencia entre los dos gráficos no da por sentadas las afirmaciones del señor Gore.

5 ERROR: La desaparición de la nieve del Kilimanjaro se debió al calentamiento global.

Juez: No se puede dar por sentado que la recesión de las nieves del Kilimanjaro se haya debido principalmente a un cambio climático impulsado por el hombre.

6 ERROR: La desecación del lago Chad es el primer catastrófico ejemplo del resultado del calentamiento global.

Juez: No hay pruebas que establezcan la causa exacta de la desecación del lago Chad.

7 ERROR: El Huracán Katrina fue una consecuencia más del calentamiento global.

Juez: No hay pruebas que certifiquen semejante cosa.

8 ERROR: Se han descubierto osos polares ahogados mientras nadaban más de 60 millas para buscar hielo.

Juez: Sólo se ha encontrado ahogados a cuatro osos polares, y fue por causa de una tormenta.

9 ERROR: Los arrecifes de coral se están decolorando debido al calentamiento global, entre otras causas.
Juez: Es muy difícil discernir cuál es el factor más importante de dicha decoloración: puede haber sido con igual fundamento por la polución o por el exceso de pesca.



Fuente: http://www.elmanifiesto.com/articulos.asp?idarticulo=95

martes, 21 de agosto de 2012

El cambio cimático empieza a preocupar...

  En el siglo XIX, empezó a tomarse conciencia de que el dioxido de carbono que se acumulaba en la atmósfera terrestre podía crear un «efecto invernadero» y aumentar la temperatura del planeta. Un proceso perceptible en esa dirección ya había empezado: un efecto secundario de la era industrial y de su produccion de dióxido de carbono y otros «gases de efecto invernadero».

A mediados del siglo XX, comenzó a ser evidente que la actividad humana había incrementado de manera significativa la producción de estos gases, y el proceso de «calentamiento global» estaba acelerándose. En la actualidad, casi la totalidad de los científicos está de acuerdo en que debemos frenar e invertir este proceso ahora, o enfrentarnos a una avalancha devastadora de desastres naturales que alterará la vida tal y como la conocemos en la tierra.

Muchas de las pruebas ya parecen evidentes también para el público. La mayor parte de los años más calurosos que se han registrado han tenido lugar durante las últimas dos décadas. En Europa, la ola de calor del verano de 2003 causó más de 30.000 muertes. En la India, las temperaturas alcanzaron los 48,1 grados centígrados, alrededor de unos 119 grados Fahrenheit.
Dos años más tarde, la ferocidad del huracán Katrina en los Estados Unidos se atribuyó en gran medida a las elevadas temperaturas de las aguas en el Golfo de México. Y en una de las muchas alteraciones geográficas, unos 250 kilómetros cuadrados de territorio se desprendieron de la costa antártica en 2008, ya que las placas que los unían a la Antártida se habían derretido.
El sistema de las Naciones Unidas está a la vanguardia de los esfuerzos para salvar nuestro planeta. En 1992, su «Cumbre para la Tierra» elaboró laConvención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (UNFCCC  ) como un primer paso para afrontar el problema. En 1998, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) establecieron el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) para proporcionar una fuente objetiva de información científica. Y el Protocolo de Kyoto  , de 1997 de la Convención, el cual tiene como objetivo reducir las emisiones de gases en los países industrializados, ya ha contribuido a estabilizar, y en algunos casos, reducir estas emisiones en varios países.
Las Naciones Unidas se han colocado sistemáticamente a la cabeza para hacer frente al cambio climático. En 2007, el Premio Nobel de la Paz se concedió de manera conjunta al ex vicepresidente de los Estados Unidos Al Gore y al IPCC "por sus esfuerzos para construir y difundir un mayor conocimiento sobre el cambio climático causado por el hombre y poner las bases para tomar las medidas necesarias para contrarrestar ese cambio.
El Protocolo de Kyoto establece unos objetivos para algunos países industrializados. Dichos objetivos vencen en 2012. Mientras tanto, las emisiones de gases de efecto invernadero han ido incrementando rápidamente tanto de países desarrollados como en desarrollo. Los esfuerzos internacionales se centran ahora en desarrollar un nuevo acuerdo para el período posterior a 2012 que sea aprobado por todos los Estados parte en la Convención sobre el Cambio Climático que se celebró en Copenhague en diciembre de 2009.

domingo, 19 de agosto de 2012

Los pájaros de montaña, indicadores de cambio climático

Los pájaros que habitan en las montañas son los mejores indicadores del cambio climático .
En estos ecosistemas, según se desprende de un estudio publicado en 'Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences', llevado a cabo por investigadores de la Universidad norteamericana de Yale.

En concreto, los especialistas han descubierto que el riesgo de extinción de los pájaros que viven en las montañas es debido al calentamiento global y que éste es mayor o menor en función de la altitud a la que los animales habitan.
De hecho, el trabajo apunta que la distribución vertical de especies a lo largo de la montaña es la mejor predicción del riesgo de extinción, más que la amplitud o variación de temperaturas que experimentan en el monte.
"Los pájaros nos permiten hacer las primeras mediciones sobre la salud de la biodiversidad presente en estos ecosistemas, especialmente a altas altitudes, en relación con el cambio climático. Las especies que se sitúan en lo más alto viven fundamentalmente en islas donde los incrementos de temperatura afectan", explica el profesor de Ecología y Evolución biológica de la Universidad de Yale, Walter Jetz.